Religioso mínimo perteneciente a la Provincia de Apulia. Fue de integérrima vida y de una asperísima mortificación que ocultaba mostrándose siempre alegre y amable. En 1691, con ocasión de la peste en Monopoli, asumió, a solicitud del Obispo y del magistrado de la ciudad, el servicio religioso de los apestados en el hospital de Santa María de las Gracias. Se entregó a su labor predicando, confesando y confortando a los enfermos, ofreciéndose como víctima de expiación. Contagiado de peste, falleció abrazado al crucifijo el 17 de mayo de 1691 a los 36 años de edad. Tras su muerte los religiosos hallaron en su celda unos atroces instrumentos de penitencia.
BIBLIOGRAFÍA:
Rosario Quaranta, Storia della Provincia Pugliese dei Minimi nel manoscritto "Historia Monumenta Chronotopographica Provinciae Apuliae" del P.Antonio Serio (I metà sec. XVIII), Roma, 2005, p. 58.