Un grupo de jóvenes de Tarento se propusieron, bajo el impulso del mínimo P.Francesco Chimienti, trabajar por la Palabra de Dios. Constituidas en un grupo que desde 1970 se llamó Missionarie della Parola di Dio, su asociación fue aprobada como Pía Unión el 8 de diciembre de 1972 por el Arzobispo Guglielmo Motolese. En febrero de 1986 la asociación fue erigida en Instituto Secular de derecho diocesano. Se extendió especialmente en la región de Apulia, aunque también en Calabria, perteneciendo muchas de sus componentes a la Tercera Orden de los Mínimos.
Su carisma es el anuncio de la Palabra de Dios meditada y vivida, de donde deriva su apostolado catequístico parroquial y diocesano. Utilizan para ello el denominado "método bíblico-penitencial". En el año 2006 el Instituto fue agregado oficialmente a la Orden de los Mínimos, siendo reconocido como expresión genuina de la familia religiosa de San Francisco de Paula.