El Padre mínimo Antonio Via nació en Celico (Cosenza) hacia 1647. Era conventual de Cosenza en 1678, donde entabló familiaridad con el Beato Nicolás de Longobardi, del que fue consejero espiritual. En los últimos años de la vida de dicho Beato en Roma, el P. Antonio da Celico fue su confesor ordinario. Se conjetura que haya fallecido entre 1715 y 1718. Perrimezzi calificaba al Padre Antonio de Celico como religioso de mucha oración y de gran austeridad. En el Capítulo General de 1758 celebrado en Lyon, se decidió, a petición del P. Ferdinando Mancini (comisionado de la Provincia de San Francesco) que se incoara la causa de beatificación del P.Antonio de Celico.