Nicola d'Amalfi

Giacomo d’Ancora nació hacia 1580 en el seno de una noble familia procedente d’Amalfi. Ingresó como religioso oblato en el convento mínimo de Nuestra Señora de la Stella de Nápoles tomando el nombre en religión de Nicola. Devotísimo de la Virgen de la Stella, se dice que con su materna intercesión (o bien con la de San Francisco de Paula), obró prodigios y obtuvo gracias de todo género. Entre los personajes favorecidos por las oraciones de fra Nicola puede mencionarse a Francesca D’Avalos, princesa de Avellino, quien obtuvo la curación de una hija enferma y el dar a luz a un varón. La edificante muerte de fra Nicola d’Amalfi, acaecida el martes de Pentecostés de 1642, fue narrada por el Padre Bonaventura de Martina. Su cadáver estuvo dos días expuesto en la iglesia, con grandísima concurrencia de fieles. Fue enterrado en la capilla de San Andrés (otros indican capilla de San Emigdio); su sepulcro era visitado por multitud de gente.

Retrato de Fra Nicola (claustro del convento de Grottaglie)

BIBLIOGRAFÍA:

• Giuseppe M. Roberti, Disegno storico dell'Ordine de'Minimi, vol. II, Roma, 1908, pp.292-293.
• Dionisio Colucci, Istoria dell'austerissimo Padre Bonaventura di Martina (edicion del Gruppo Umanesimo della Pietra), Martina Franca, 2006, pp.231-233.